miércoles, 28 de agosto de 2013

LAS CIUDADES QUE YO VEO NO LAS VE NADIE

VERSIÓ EN CATALÀ

 Las ciudades que yo veo no las ve nadie. A menudo me sorprende un latido bajo los pies y un escalofrío, entre el amor y el terror, me recorre la espalda. Miro a la persona que está a mi lado, esperando una mirada cómplice, una señal que me haga saber que también lo ha notado. Pero no. Normalmente no hay respuesta. Y de todos modos, ¿qué haríamos? Escogeríamos la canción más desgarradora y la cantaríamos como resucitados, como monstruos enamorados, con los ojos cerrados para no perder detalle de cómo nos reventaría el corazón, a gritos. Y a pesar de todo no entenderíamos lo mismo. Duales para siempre.

Pero no. Las ciudades que yo veo no las ve nadie. La bestia que me ahoga y me quiere allá donde vamos. El aroma de millones de soledades, fantasmas, la canción que se pierde bajo el asfalto. A contraluz se esconde todo el horror y toda la maravilla. Aquella presencia extrañamente conocida que toca uno por uno todos mis dedos. Los pies. Las manos. Como si no estuviera segura de quién soy.